26 de abril de 2016

CRÓNICA III CHALLENGE DEL CORREDOR DEL HENARES- SEGUNDA PRUEBA LOECHES

Segundo día. Parece que el sol no calienta, pero lo hará. Parece que las piernas no duelen mucho, pero lo harán. Parece que después de la carrera de ayer hoy no se saldrá a tope pero se saldrá.

Foto 1ª y 2ª de la Peña Ciclista Rodríguez Magro
Al igual que ayer, no tenía mucha información sobre la prueba, y en este caso, la tenía errónea. Y así, sin saber muy bien donde estaba o donde estaban mis piernas... veo que me corto sin llegar al km 5. No me lo puedo creer. Bajo la cabeza. Sigo pedaleando. No tiro la toalla. Vuelvo a sentir que me tapan el aire y estoy dentro. Lo paso francamente mal en un par de ocasiones, falso llano, rotonda, pueblo, parón y de pronto Corpa (esta carretera me suena). Intento aprovechar la subida para colocarme mejor pero al coronar me cierran a la derecha y justo delante se enganchan con algunos ciclistas que estaban animando. Pie a tierra, voces y rabia. Pero hoy me acompaña la suerte y engancho otra vez. Parece fácil. Bajada. Ay señor, si yo bajo mal como bajan algunos. Me da miedo adelantar a algunas unidades pero arriesgo un poco para no quedarme muy atrás pero la cosa se pone muy fea. Otro calentón y otro parón. Tomo referencias, hablo con los compañeros, (echo en falta a Rubén hoy) parece que estamos todos en el pelotón y me baja el pulso como nunca en una carrera. La gente se estaba guardando para el cochino.


Sin saber lo que viene me preocupa la calma y empiezo a adelantar posiciones en cuanto veo algunos arreones. Parece que me giramos, se oyen silbatos, avisos de yo que sé que. Derrapada. Puente estrecho y comienza subida por un asfalto bacheado que nos acompañaría mucho tiempo. Me libro por los pelos de la caída y aprieto los dientes para no quitar el plato grande. Pero lo quito. Parece que suaviza. Lo pongo. Parece que no se acaba. Lo quito. Trato de regular sin perder buenas ruedas. Cae mucha gente. Pasan coches. Está claro que por delante se van. Que largo. No se acaba. Las letras pintadas en el suelo indican P.M. pero aun veo otro repecho (que graciosos). Hemos quedado unos pocos pero no hay tregua en la bajada. Los baches no dejan casi pedalear ni comer ni coger aire. En las curvas me defiendo pero en al final veo que me corto. No pasa nada, me adelantan por detrás y consigo entrar. El grupo se hace más grande. Trato de comer algo, pero hay otro tirón y tengo que darlo todo con el gel en la boca durante unos kilómetros. Cambiamos el rumbo y otra vez para arriba. Me alivia volver al menos a una carretera sin baches. Parece que subimos más tranquilos pero me voy quedando atrás. 

Pasa el coche y oigo: ¡¡Vamos segoviano!! (Gracias Juanma del Getafe) y aprovecho los ánimos para levantarme y adelantar a varios que se cortan. Estamos arriba. Me dicen que ya está hecho. Todo bajada (salvo alguna cosa). Se va muy rápido y tengo que ir bien pegado a rueda para no cortarme. En un repecho estoy a punto de tirar la toalla. Me sacan varios metros. Parecen kilómetros. Me animan desde un coche rojo (creo que es el del Esteve). No sé que me dicen. Pero al ponerse a mi lado y ver que el repecho se terminaba hago un último esfuerzo (eso pensaba yo) y entro de nuevo al grupo. 

Ahora sí, no paro hasta meterme delante. Saludo a Alfonso del Esteve, me dice que vamos bien, que hay unos Orquin escapados y otro grupo pequeño por delante nuestro, pero muy pocos y no muy lejos. Empiezo a creérmelo, me concentro en no soltar rueda pero aun hago la goma un par de veces. 

Veo la meta. Disfruto. Me voy descolgando. No esprinto. Saludo. Esta sí. Conseguido. 




Aquí tenéis las clasificaciones del día y la general final, mis datos de Strava y algunas fotos más de la llegada. En la primera se puede ver la distancia que nos sacaba el grupo predecesor, en la siguiente mi grupo y por último los primeros... Sin comentarios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario